domingo, 4 de agosto de 2013

Chinchillas

Las chinchillas son nativas de los Andes, existen varias especies; las domesticas son del género Chinchilla laniger. Suelen vivir una media de 10 años (las hembras son más longevas que los machos), son roedores hervívoros y pesan entre 400-600 gramos.

Son unas mascotas encantadoras y muy sociables, pero son muy asustadizas si no han sido sociabilizadas bien o no son manejadas con cuidado. Son muy buenas, nunca suelen morder (a no ser que tus dedos huelan a comida), pero no son adecuadas para niños porque tienen los huesos muy frágiles. Por la noche, ingieren determinadas heces que le aportan muchos nutrientes y vitaminas.
Necesitan un gran espacio para ellas; ya que les encanta correr y saltar. Lo más adecuado son las jaulas de 1,5 m de largo x 0,80 m de largo x 0,50 m de ancho con barrotes y de superficie lisa, para evitar fracturas innecesarias, y de buena ventilación (los acuarios no son adecuados, como ya hemos visto antes). En la jaula, es necesario que pongamos varios pisos (más de dos); con objetos con el que puedan interactuar nuestras chinchillas. Para los ejemplares  tímidos o nuevos en casa, es necesario poner un sitio para que puedan esconderse (una casita que no puedan roer, y si lo hacen, que no sea perjudicial para ellas). Es recomendable poner una hamaca (les encantan), una percha y demás juguetes.  Escoja para su mascota una madera que no esté tratada y no sea tóxica, como la madera de mora o de peral. Evite en la medida de lo posible madera de cedro, de árboles cítricos y de bayas. Las piñas de los pinos son excelentes juguetes, pero hay que hervirlos para que suelten toda la resina. Respecto a ruedas para chinchillas, hay un tipo diseñada específicamente para ellas que se llaman Flying soucer. Son difíciles de encontrar en las tiendas, pero por internet las venden.


Es muy recomendable soltarlas (siempre con vigilancia) en un sitio sin peligros y dónde puedan correr a sus anchas. Son roedores, por lo que hay que evitar poner a su alcance todo lo que puedan destrozar y cualquier cosa que sea peligroso para ellas.
Las chinchillas son animales que no sudan, por lo que tienen que bañarse con arena para eliminar la humedad de su pelaje. Hay que habilitar una bandeja o bañera (siempre fuera de la jaula) con la arena necesaria para un baño, y una por animal. Podemos bañar a nuestra chinchilla una vez cada dos o tres días, preferiblemente por la mañana, cuando ha cesado su actividad nocturna.  Los baños duran alrededor de unos 5 minutos, si no retiramos la bandeja tras este tiempo, tienden a volcarla o a hacer sus necesidades en ella. La arena se compra en cualquier tienda de animales, es específicas para ellas. Si vemos que el pelo de nuestra chinchilla esta apelmazado y/o mate, se recomienda bañar con más frecuencia; ya que en los sitios que existe más humedad, hay que bañarla más veces. Bajo ninguna circunstancia, moje con agua a su chinchilla, ya que no se puede eliminar el agua del pelo (esto puede llegar a ser mortal) y provoca la proliferación de hongos.

La jaula tiene que estar a una temperatura de unos 20 ºC, ya que como no sudan, el golpe de calor es más frecuente y puede ser mortal. Si hace mucho calor, meter una losa de cerámica en el congelador y ponérselo cerca de la jaula para que note el frio y pueda refrigerarse. Notamos evidencias de calor excesivo en las chinchillas cuando permanecen casi todo el día tumbadas.
Respecto al sustrato de la jaula, lo mismo que decíamos de los conejos; no poner arena de gatos ni con excesivo polvo. Muy adecuadas las virutas prensadas. Yo, personalmente, nunca escojo el serrín; crea muchas humedades y es muy sucio.

El 80% de su dieta es heno y debe tenerlo siempre a su disposición. Es la principal fuente de fibra y asegura el buen funcionamiento del aparato intestinal, además del desgaste correcto de los dientes, ya que son de erupción continua. Los henos más adecuados son los de Timothy (fleo) y los de alfalfa (estos últimos se dan ad libitum en el crecimiento y muy poca cantidad en animales adultos). A parte de esto, hay que dar pienso en forma de pellets, se recomienda que sea homogeneo para que no seleccionen.  Deben contener al menos del 20-35% de fibra.
Podemos dar de vez en cuando verduras o frutas. Nunca deben de superar el 5% de su dieta (tienen mucha agua y pueden provocar desordenes gastrointestinales), por lo que como máximo, daremos una cucharadita de postre (siempre tenemos que empezar dando de menos a más cantidad). Dentro de las verduras, pueden comer las de hoja verde como la acelga, espinaca, escarola, endivia, berros, canónigos, rúcula, achicoria, hojas de zanahoria, alcachofa, berza, grelos, apio, diente de león y trébol. Ocasionalmente podemos darle fruta, como la manzana que es la más indicada. Muy esporádicamente como premio se pueden dar frutos secos crudos sin sal. Nota: No dar cereales, si los vemos en la composición del pienso, hay que comprar otro.


Las chinchillas son animales gregarios, por lo que es recomendable tener más de una chinchilla. Pueden convivir con otros animales, siempre que se adapten correctamente y no presenten ningún peligro para ninguna de las especies implicadas. Debe ser bajo supervisión.

jueves, 1 de agosto de 2013

Pasterelosis en Conejos

La pasterelosis es una enfermedad que afecta al tracto respiratorio de nuestros conejos.
Los síntomas incluyen estornudos  y ojos pegajosos, también puede afectar a otras partes del cuerpo y causar infecciones de oído (da como resultado  la inclinación de la cabeza), abscesos e infecciones uterinas. La muerte súbita por septicemia es poco frecuente pero puede ocurrir si no se trata a tiempo. A veces viene aparentemente de la nada, ya que puede permanecer en estado latente durante años. Alrededor del 80% de los casos pasterelosis se detecta a tiempo, por lo que la infección puede ser detenida.  Es a menudo una enfermedad endémica en colonias de conejo y la adquisición de la infección en conejos jóvenes se correlaciona con la prevalencia en los adultos.
Esta enfermedad está provocada por Pasteurella multocida que se encuentra de forma saprofita y asintomática en el tracto respiratorio superior.
Se trata de una enfermedad de fácil contagio por vía aérea entre animales muy cercanos, o también de forma directa por contacto de madres a gazapos a través de estornudos, mucosidades, agua de bebida e incluso las personas también pueden transmitirla.
Su localización es muy amplia y se debe a que una vez que entran en el animal, están favorecidas por otros agentes infecciosos concomitantes como Bordetella bronchiséptica, Micoplasma o virus que, unidos a factores ambientales externos desfavorables para los animales ,provocan la infección y su posterior difusión por vías aéreas respiratorias y por la sangre a todos los órganos.
La mayoría de los conejos expuestos a esta bacteria, albergan el microorganismo causante,y aunque no padezcan la enfermedad, actuando como reservorios de esta (ya que permanece latente durante muchos años); por lo que esta enfermedad puede convertirse en un problema crónico que es difícil de controlar. Sólo un 11% de los conejos de casa, portan estas bacterias.

Podemos encontrar diferentes formas de la enfermedad:


- Rinitis: Se conoce como rinitis a la inflamación de la mucosa de las fosas nasales, que cursa con estornudos, ruidos respiratorios audibles y secreción serosa o mucopurulenta.
- Neumonía enzoótica: Puede ocurrir la progresión de rinitis a neumonía. Los conejos afectados, mueren generalmente de forma aguda sin mostrar signos clínicos de enfermedad (especialmente los conejos jóvenes). No obstante, suele detectarse anorexia, letargia, fiebre, disnea, taquipnea y posiblemente cianosis. Si la neumonía es diagnosticada de forma temprana, una terapia antibiótica agresiva puede tener algún efecto.
- Otitis media: La extensión de la infección por P. multocida de la nariz al oído medio ocurre probablemente a través de la trompa de Eustaquio. La otitis media puede ser asintomática o, en caso de afección del oído interno, el animal puede desarrollar tortícolis. Es una situación habitual que se caracteriza por signos clínicos como movimientos reiterados de la cabeza, caída de las orejas (si el conejo es de orejas erectas) y suelen aparecer sintomatología del oido interno, con implicación de los conductos semicirculares y alteración del equilibrio.

Aparece un exudado de color blanquecino y consistencia cremosa en el oído medio, que puede ser tanto unilateral como bilateral. Es una de las formas más habituales que se presentan en los conejos de compañía.
- Conjuntivitis: La conjuntivitis es una manifestación común. La inflamación del conducto nasolacrimal  puede producir la obstrucción del mismo. Los conejos únicamente poseen un conducto lacrimal en cada ojo, por lo que su oclusión desencadena una producción continua y excesiva de lágrimas.
- Abcesos: Si Pasteurella  entra en una herida (por una lesión o una picadura de insecto),podemos observar como resultado un abceso. Los más comunes son la mejilla o en la boca. Los abscesos ocurren con mayor frecuencia en la boca si el conejo tiene maloclusiones (dientes torcidos), y sus dientes han crecido lo suficiente como para lesionar la boca, proporcionando un espacio para que la bacteria se asiente y prolifere.
- Mastitis, Metritis y orquitis: Si una hembra con la bacteria da a luz, ella puede desarrollar mastitis (abscesos en los senos) o metritis (infección uterina). Los machos pueden padecer orquitis (infección de los testículos).
- Parálisis: Por último, algunos conejos desarrollan parálisis en el tercio posterior en las etapas avanzadas, incluso si los síntomas anteriores no eran evidentes.

Para la confirmación de esta enfermedad, no basta con presenciar los signos clínicos; hay que realizar un cultivo microbiológico o un test serológico de la enfermedad. Es muy importante no proceder al tratamiento sin aislar la bacteria, y se recomienda hacer un antibiograma previo para ver a que antibióticos es sensible la bacteria. En mascotas, suelen ir bien Enrofloxacina  o Doxiciclina. En ambos casos, administraremos el antibiótico un mínimo de 7 días prolongándose si fuera preciso siempre y cuando no aparezcan síntomas secundarios al tratamiento como diarreas, que se pueden corregir con Lactobacillus (yogurt). En casos más graves se recomienda la administración de fluidoterapia, mucolíticos y broncodilatadores (Clorhidrato de Bromhexina) e incluso diuréticos (Furosemida) de presentarse edema. En caso de que se den abscesos, sería conveniente la cirugía para drenarlos.